Los acúfenos o tinnitus son una condición que afecta a muchas personas y que se caracteriza por la percepción de sonidos en el oído o en la cabeza sin que exista una fuente externa que los produzca. Estos sonidos pueden ser zumbidos, pitidos, silbidos o murmullos que varían en intensidad y frecuencia. Los acúfenos pueden tener diferentes causas, como lesiones en la vía auditiva, exposición a ruidos fuertes, estrés, infecciones, tapones de cera, problemas en la articulación temporomandibular o en la zona cervical, entre otras. En algunos casos, los acúfenos pueden ser un síntoma de una enfermedad más grave, como un tumor cerebral, una enfermedad cardiovascular o un trastorno metabólico.
Los acúfenos pueden afectar negativamente a la calidad de vida de las personas que los padecen, ya que pueden provocar dificultades para dormir, concentrarse, relajarse o comunicarse. Además, pueden generar ansiedad, depresión, irritabilidad o aislamiento social. Por eso, es importante acudir al médico especialista en otorrinolaringología pediátrica si se presentan estos síntomas, especialmente si son persistentes, intensos o unilaterales.
El diagnóstico de los acúfenos se basa en la historia clínica del paciente, la exploración física del oído y las pruebas audiológicas. Estas pruebas pueden incluir una audiometría, una impedanciometría, una otoemisiones acústicas o un potencial evocado auditivo. El objetivo es determinar el tipo, la frecuencia y la intensidad de los acúfenos, así como descartar otras patologías asociadas.
El tratamiento de los acúfenos depende de la causa que los origina. En algunos casos, se puede resolver el problema eliminando el factor desencadenante, como un tapón de cera, una infección o una medicación ototóxica. En otros casos, se puede recurrir a fármacos que alivian los síntomas, como antidepresivos, ansiolíticos o vasodilatadores. También existen dispositivos que generan sonidos que enmascaran los acúfenos, como audífonos o generadores de ruido blanco. Otra opción es la terapia de reentrenamiento del tinnitus (TRT), que consiste en una combinación de asesoramiento psicológico y estimulación sonora para habituar al cerebro a ignorar los acúfenos. Por último, existen terapias alternativas como la acupuntura, la hipnosis o la relajación que pueden ayudar a reducir el estrés y mejorar el bienestar emocional.
Los acúfenos son una realidad para muchas personas que sufren esta molestia auditiva. Sin embargo, existen soluciones para mejorar su calidad de vida y reducir su impacto negativo. Lo más importante es consultar con un profesional cualificado que pueda ofrecer un diagnóstico adecuado y un tratamiento personalizado. El Dr. Blas Sánchez Reyes es un experto en otorrinolaringología pediátrica que cuenta con una amplia experiencia y formación en el manejo de los acúfenos y otras patologías del oído.